7.12.2020. La ciudad bonaerense de Bragado vive por estas horas un hecho conmocionante: el viernes falleció una joven de 26 años de edad tras haberse disparado un tiro en la cabeza con su arma reglamentaria de la Policía Bonaerense, atormentada por la extorsión de su ex pareja que había viralizado imágenes de su intimidad, hecho que comúnmente se conoce como “pornovenganza”.
La víctima se llamaba Belén San Román, madre de una niña y un niño pequeños. Se había disparado en la cabeza el 30 de noviembre último y, según su familia, “no aguantó más su situación luego de que su ex pareja viralizara fotos y videos íntimos suyos”.
Pese a ser víctima de la extorsión y a su desesperada situación que la llevó a tomar tan drástica decisión, la Auditoría General de Asuntos Internos (AGAI) de la Policía Bonaerense le inició a San Román un sumario administrativo.
Belén se desempeñaba en el Comando de Patrullas Rural de Bragado desde hacía algunas semanas, cuando su ex pareja Tobías Villarruel, oriundo de Chivilcoy, viralizó un video y fotos íntimas de ella para extorsionarla.
“Tobías Villarruel, de la ciudad de Chivilcoy, el que viralizó fotos y videos de mi hija, hostigándola y amenazándola, hizo que ella termine con su vida”, escribió Graciela Álvarez, la mamá de la policía, en su cuenta de Facebook:
Por su parte, su padre escribió en la misma red social: “Que la muerte de Belén y otras Belén no sean impunes. Que la celeridad prime por sobre lo conveniente, la violencia machista en distintas modalidades MATA”.
Al respecto, los familiares de Belén pidieron impulsar el proyecto de ley para incorporar como delito “la difusión no consentida de contenidos sexuales íntimos”, que tendrá pena de prisión de tres a ocho años y multas.
El proyecto de ley contra la “pornovenganza”, que cuenta con media sanción en el Senado de la Nación desde julio pasado, sigue frenado en la Cámara de Diputados y espera su tratamiento.