25.6.2021. En los tiempos de fuertes luchas en pos de la independencia argentina –como en otros tantos países- y a los fines de diferenciarse de sus enemigos pues todavía no contaban con uniformes, las partes sabían colocarse un distintivo en una parte de sus prendas, como ser en gorros y chaquetas. Generalmente, los combatientes portaban unas cintas al solo fin de evitar equívocos en pleno enfrentamiento.
Y también hubo varias referencias a los colores como símbolo o señal para ubicarse en uno u otro lugar de la contienda. A los históricos “rojo punzó”, “azules”, “colorados” o “verdes”, la era moderna sumó los “amarillos”, indivisible de un sector político como lo es el PRO, cuya máxima referencia es el ex presidente Mauricio Macri.
Por estas horas, el PRO está inmerso en una interna feroz para determinar qué lugares y qué distritos tendrán sus respectivas candidaturas en las próximas elecciones para ocupar bancas en el Congreso Nacional, legislaturas provinciales y en la de Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Como se sabe, la pelea central del PRO está en dos distritos: la provincia de Buenos Aires y CABA, en donde la estrategia del Jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta por imponer a su vicejefe Diego Santilli como cabeza de lista de candidatos a diputados nacionales por la Provincia y a María Eugenia Vidal para la Legislatura porteña está causando estragos.
Al contrario de lo que piensan “Los Macri” (dado que al ex presidente se sumó su primo e intendente de Vicente López, Jorge Macri), que no quieren un candidato “porteño” para pelear en Provincia, Larreta sigue avanzando con sus planes. Y para eso insiste con reuniones con intendentes que hasta hace un par de horas pensaban en contra de su estrategia.
Entre los intendentes que no querían a Santilli candidato 2021 en representación de la provincia de Buenos Aires –también como trampolín para una eventual candidatura a gobernador en 2023- se encontraban el de Tres de Febrero, Diego Valenzuela; General Pueyrredón (Mar del Plata), Guillermo Montenegro; La Plata, Julio Garro y el de Lanús, Néstor Grindetti.
Valenzuela, Montenegro, Garro y Grindetti, aunque hasta el momento no serían los únicos que cambiaron de opinión, no sólo decidieron contradecir a Macri sino que también aceptaron portar la “cinta amarilla” como distintivo del equipo al que pertenecen dentro de la interna.
Eso pudo verse en el encuentro de este último jueves que se llevó a cabo en Tres de Febrero. Allí, Rodríguez Larreta insistió con la “necesidad de seguir trabajando cerca de los vecinos que atraviesan la difícil realidad sanitaria y económica, y de seguir construyendo de cara a 2023”.
El último candidato a intendente de Berazategui de Juntos por el Cambio, Julián Amendolaggine, participó del mismo y expresó: “El encuentro fue muy productivo. Todos coincidimos en la importancia del trabajo territorial y del valor de seguir construyendo juntos una alternativa de país a la que propone el kirchnerismo".
"Horacio, los intendentes, los legisladores y todos los que día a día construimos localmente, creemos que podemos vivir mejor y vamos a trabajar para hacer realidad ese proyecto", finalizó Amendolaggine.