Hubo mayoría de condenas en los Juicios por Jurados de la provincia de Buenos Aires

9.5.2018. La mayoría de los Juicios por Jurados que se implementaron en la provincia de Buenos Aires terminaron siendo condenatorios para los acusados de los más diversos delitos penales, entre los que se encuentran casos que en su momento fueron resonantes para la opinión pública. Dicho sistema entró en vigencia hace tres años.

Efectivamente, la provincia de Buenos Aires cumple tres años con el sistema de Juicios por Jurados con mayoría de veredictos condenatorios: de los 173 llevados a cabo entre marzo de 2015 y diciembre de 2017, en casi 6 de cada 10 (el 56 por ciento) declararon culpable al acusado.

Las absoluciones, sin embargo, no representan el resto de la torta, sino apenas el 32 por ciento de ésta, ya que el 12 por ciento faltante refiere a situaciones especiales de "veredictos mixtos"; casos donde hubo más de un acusado, con diferentes resultados para cada uno, o condenas, pero por delitos menores.

Ahora bien: ¿Qué es un Juicio por Jurados y cómo funciona? Se basa en las pruebas que se presentan durante lo que dura el juicio, período en el cual los 18 ciudadanos elegidos (12, mitad mujeres, mitad hombres, más seis suplentes) no pueden ni deben informarse del caso por "agentes externos", como medios de comunicación o familiares, entre otros, para garantizar la imparcialidad.

Tras los alegatos y la palabra final del acusado, el jurado se encierra a deliberar todo el tiempo que considere necesario y sólo determina si la persona sospechada es culpable o no. La pena correspondiente la establece más tarde el juez, que presencia el debate y lo modera.

Para que haya una condena, en general, se necesita que 10 de los 12 integrantes estén de acuerdo. Excepto para los casos donde se debate una condena a reclusión perpetua, donde es necesario unanimidad.

Uno de los casos más recordados en donde se determinó que el acusado sea condenado a reclusión perpetua fue el del femicida Fernando Farré, quien había asesinado a su esposa de 66 puñaladas.

El Juicio por Jurados dispuso, en junio de 2017, su reclusión perpetua.