AUBASA: empresa del Estado bonaerense que con las tarifas se comporta como una compañía privada más

12.2.2019. “Concebimos a AUBASA como una empresa del Estado que está al servicio permanente del usuario de nuestras rutas y mira la infraestructura vial como un factor clave para el desarrollo productivo del país”.

De esa manera, se presenta en la página institucional de Autopistas Buenos Aires Sociedad Anónima (AUBASA) su presidente, Víctor El Kassir.

Uno de los aspectos que menciona El Kassir en su carta de presentación, tiene que ver con “trabajar en el mantenimiento permanente de las rutas”. Precisamente, ese es el motivo de la nueva convocatoria a audiencia pública a los usuarios del Corredor Vial del Atlántico (rutas 2, 11, 56 y 74) y de la autopista Buenos Aires–La Plata para los días 19 y 20 de marzo, respectivamente.

Como se sabe, el “mantenimiento permanente de las rutas” implica trabajar en la mejora de las mismas con el dinero proveniente del cobro de los peajes a sus usuarios.

En las audiencias públicas, las autoridades de AUBASA simplemente se van a limitar a notificar cuáles son los nuevos precios de los peajes, dado que las mismas no son vinculantes: allí, los usuarios expresan sus quejas pero la decisión de aplicar los aumentos no retrocede.

El ministro de Infraestructura, Roberto Gigante, formalizó este martes el llamado a audiencia pública.

Evidentemente, los números no les cierran a las autoridades: en la Cláusula Octava del Contrato de Concesión que fuera aprobado por el Decreto Nº 909/13, los valores tarifarios y precios vigentes en cada momento se consideran como valores máximos regulados, determinando dos tipos de revisiones tarifarias: una extraordinaria por variaciones de precios y otra ordinaria cada tres años.

Las “extraordinarias” ya son comunes. La excusa: adecuación de tarifas por incidencia de los índices de variaciones de precios sobre su modelo económico.