Demanda millonaria del Sindicato Independiente de Remiseros de La Plata contra el Banco Provincia
Casa Matriz del Bapro, en La Plata.

Demanda millonaria del Sindicato Independiente de Remiseros de La Plata contra el Banco Provincia

10.6.2019. El Sindicato Independiente de Remiseros (SIR) de La Plata presentó una demanda de once millones de pesos ($ 11.000.000) por daños y perjuicios contra el Banco Provincia, al considerar que dicha entidad “actuó de manera ilegal al hacer lugar al uso de nuestra cuenta corriente” a supuestos apoderados de una intervención gremial.

En su presentación, el secretario general del SIR, Javier Scaramutti, solicitó la intervención de la justicia para “interrumpir los daños y perjuicios que hace más de un año viene causando la parca actitud de los directivos del Banco de la Provincia de Buenos Aires, en especial la Sucursal Los Hornos”.

Según Scaramutti, la entidad bancaria “mantuvo los efectos de una intervención irregular, ilegal, arbitraria y a todas luces improcedente”, la que a su entender “produjo y continúa provocando daños actuales y futuros hasta que se obligue a dicha entidad, mediante orden judicial a restablecer la actividad financiera que esta parte gozaba en dicho organismo”.

Al respecto, el referente del SIR indicó en su denuncia que “una simple nota enviada por el Sr. Alejandro Poli, y una simple visita a una página web les da fundamentos legales para realizar extracciones de la cuenta de este Sindicato”, motivo por el cual “no nos dejó otra alternativa que realizar la denuncia penal, la cual quedó radicada en la UFI 5, de los tribunales penales de La Plata”.

La mención a Poli no es casual: el 23 de mayo de 2017, la “Federación Argentina de Remis” que encabeza, notificó al SIR que estaba en un proceso de intervención.

Al respecto, Scaramutti explicó que el SIR es una entidad sindical de primer grado y la Federación comandada por Poli es de segundo grado, lo cual es “un absurdo, antijurídico y penoso proceso de intervención, movimiento de interés exclusivamente político de quien siempre ambicionó personalmente controlar el Sindicato de primer grado”.

En ese sentido, el secretario general de los remiseros platenses sostuvo que “para realizar el procedimiento de intervención a un Sindicato debe haber una orden judicial de un juzgado Federal, luego de una resolución ministerial”. El 22 de agosto de 2018, la intervención en cuestión fue declarada nula y con sentencia firme por la Cámara Nacional del Trabajo Sala II.

Demanda millonaria del Sindicato Independiente de Remiseros de La Plata contra el Banco Provincia
Alejandro Poli (centro)

Problemas con la cuenta bancaria

El problema con el Banco Provincia comenzó cuando quienes se autoproclamaron interventores del SIR llevaron un sello emitido por el ministerio de Trabajo de la Nación (en ese entonces a cargo de Jorge Triaca), con el que supuestamente acreditaban la autoridad gremial.

“Poli y sus colaboradores se presentaron en la Sucursal Los Hornos del Banco de la Provincia de Buenos Aires, donde el SIR poseía una Cuenta Corriente, la cual era utilizada para llevar a cabo nuestras operaciones bancarias”, comentó Scaramutti.

En ese sentido, el secretario general precisó que junto a Poli “se presentó espontáneamente el supuesto interventor, Roberto Daniel López”, quienes ante el gerente de la sucursal, Jorge Corbeta, con ese mismo sello del ministerio “procedieron a quitarle al SIR la administración y disposición de los fondos”.

“A partir del 20 de julio de 2017 retiraron dinero de la cuenta, lo que fue un claro perjuicio económico, como así también irreparable, atento que se privó al SIR a operar legítimamente como la ley lo regula y tiene derecho, no pudiendo hacer frente a numerosos créditos que había asumido con antelación”, dijo Scaramutti en su demanda contra el Bapro.

Según el referente de los remiseros platenses, Corbeta fue quien “ordenó el congelamiento de la cuenta y posterior intervención de sus fondos, permitiendo que se extraigan sus saldos, a pesar la intensa comunicación y puesta en su conocimiento de la invalidez, ilegalidad e ineficacia de la intervención denunciada por nosotros”.

“Según el estatuto del Banco  de la Provincia de Buenos Aires, el único motivo para intervenir una Cuenta Corriente es la existencia de una orden judicial, la cual no existió ni existe a la fecha”, expresó Scaramutti.

La cuenta bancaria en cuestión, al momento de la intervención de Poli y López, contaba con un saldo de doscientos cuarenta y ocho mil ochocientos veintisiete pesos con seis centavos ($ 248.827,06). El 9 de abril de 2018, el Banco Provincia le informó al SIR que había decidido cerrarla: el saldo que quedaba era de catorce mil cuatrocientos pesos con 31 centavos ($ 14.400,31).

 

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