Miércoles 24.4.2024
24.6.2020. Desde hace unos días, los integrantes del Cuartel Central de Infantería de la Policía Bonaerense están viviendo momentos de incertidumbre y preocupación por temor a ser contagiados de Coronavirus, dado que les notificaron de la confirmación de algunos casos pero les pidieron que mantengan la situación “en secreto”.
“Nuestra seguridad y las de nuestras familias no pueden estar en secreto”, advirtió un integrante de la mencionada dependencia, quien a su vez denunció que “tanto acá (en referencia al edificio de Infantería ubicado en Avenida 1 y 59 de La Plata) como en otras dependencias del Conurbano, mantienen todo en secreto”.
En ese sentido, otro de los voceros consultados por este portal dijo que “no se informa al resto del personal, no se aísla a la gente con contacto directo con los positivos para no perder personal”.
“Lo que están haciendo nuestros jefes es poner en riesgo la salud de los demás efectivos y por ende a sus familias”, sostuvo, para luego indicar que “uno de los integrantes del cuerpo de Infantería de la localidad de Ciudadela (Partido de Tres de Febrero) fue trasladado a La Plata para su internación”.
Otro de los aspectos que merecieron las críticas del personal está relacionado a la falta de prevención para evitar contagios de Coronavirus: “En el Casino de Oficiales almuerzan todos juntos sin ningún tipo de distanciamiento; pero lo peor de todo es que en muchas dependencias se comparten los colchones”.
“Estamos en la primera línea para frenar el avance del Coronavirus junto con los empleados de Salud, pero a nadie les importamos; hay muchos casos en la fuerza y lo más triste es que nos vamos a contagiar todos y nuestras familias también”, sostuvo uno de los que motorizó los reclamos a las autoridades.
Por si eso fuera poco, los efectivos de Infantería denunciaron que “todavía no nos pagaron los plus (incentivos) que sí fueron otorgados a las demás fuerzas”, y que además “no hubo aumentos de sueldo para nadie”.
“No tenemos insumos de ningún tipo, tenemos que comprarnos nosotros los elementos de protección con los magros sueldos que cobramos, muchos de nosotros por debajo de la línea de pobreza”, agregó una de las fuentes de dicha institución.
En tal sentido, puso como ejemplo que “el uniforme consistente en un pantalón, camisa y borcego nos cuesta 12 mil pesos y a nosotros nos pagan 1.100 pesos para mantenimiento de nuestras prendas”, para luego agregar que “eso lo tenemos que afrontar con magros sueldos, que oscilan entre 35 y 40 mil pesos”.
“Muchos de nosotros caímos en la indigencia, las horas de Compensación de Recargo de Servicio (CORES) las están pagando 60 pesos y, como agravante, podemos decir que los pagos de Policía Adicional (POLAD) no se hacen desde enero”, detalló.
En cuanto a las POLAD, el vocero sostuvo que la mayoría se llevan a cabo en dependencias del Gobierno provincial, como ser Lotería y Casinos y ministerios. “Los únicos que cobraron son los que prestaron servicios en los bancos”, acotó.
