4.3.2024. El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, brindó este lunes por la tarde el tradicional mensaje con el que dejó inaugurado el período de sesiones ordinarias de la Legislatura bonaerense, en el que no ahorró críticas al presidente de la Nación,Javier Milei, además de mostrarse escéptico ante la convocatoria que realizó el Jefe de Estado para suscribir un pacto fundacional el próximo 25 de mayo en Córdoba.
“Después de someter al pueblo, a la democracia y al federalismo a una agresión tan inédita como salvaje, ahora se nos lanza una invitación que se parece más a una amenaza o una imposición que a un diálogo”, afirmó Kicillof al encabezar la apertura del 152° período de Sesiones Ordinarias de la Legislatura bonaerense.
“Nuestra respuesta es muy clara: cuenten con nosotros para reuniones de trabajo, para encuentros destinados a solucionar problemas, incluso para debatir. Pero si se trata de encuentros para las fotos y el marketing… arranquen nomás si no llegamos”, destacó.
“Ante este brutal contexto, los lineamientos rectores de nuestro proyecto los próximos cuatro años seguirán siendo un Gobierno protector, un Estado presente y un pueblo solidario”, sostuvo el Gobernador. “Estamos orgullosos de lo que hicimos, pero no satisfechos. No queremos que las cosas sigan como están: nosotros no somos el gobierno de la continuidad, somos el verdadero gobierno de la transformación”, expresó Kicillof y agregó: “Los bonaerenses decidieron que los problemas no se solucionan con motosierra ni con dinamita. Sin embargo, esa voluntad mayoritaria de progreso encuentra hoy un obstáculo principal: las políticas que lleva adelante el Gobierno Nacional”.
En ese sentido, el Gobernador subrayó que “en muy poco tiempo va quedando claro que esta dirección que adoptó el país no nos conduce a un mayor alivio ni a más bienestar, ya que el ajuste solo produce dolor, desintegración y desigualdad”. “Nunca un ajuste es inevitable, jamás el sufrimiento de los que ya sufren es el remedio para nuestros problemas. Nuestro pueblo ya hizo demasiados sacrificios: no queremos motosierra, queremos más inversión para seguridad, salud y educación”, explicó.
“En la campaña electoral se repitió hasta el cansancio que el ajuste esta vez no era para los trabajadores, la clase media o los más vulnerables. La mentira está a la vista: las medidas que se tomaron desde el primer día de gobierno dejaron en evidencia que los únicos perjudicados son las pymes, los trabajadores y los que menos tienen”, señaló Kicillof.
Al respecto, destacó que “a los dos días de asumir, el presidente Javier Milei ordenó hacer la devaluación voluntaria más grande de la historia argentina: depreció la moneda un 118% y puso en marcha la desregulación de los mercados de bienes y servicios básicos e imprescindibles para la sociedad”. “El abandono de las funciones del Estado llevó a las nubes a los alquileres, los remedios, el combustible, los alimentos, las prepagas, y las cuotas de los colegios”, sostuvo y remarcó: “La única novedad es que se hizo con mayor profundidad y velocidad que en otras ocasiones, pero sin ninguna medida de compensación, sin red, sin acompañamiento y sin piedad”.
“Los salarios registrados tuvieron la peor caída en términos reales en más de 20 años, llevando además a una recesión que ya se empieza a observar con despidos en la construcción y en el comercio, suspensiones en la industria; cierre de empresas y de negocios”, explicó.
Asimismo, Kicillof expresó que “el Gobierno Nacional decidió eliminar por completo la obra pública y, tras la muerte anunciada de la Ley Ómnibus, le sacó del bolsillo parte del sueldo a los docentes y aumentó el pasaje de colectivo en todo el país”. “Las transferencias que han cortado responden a leyes, decretos, normas y acuerdos vigentes, por lo cual el Gobierno nacional está incumpliendo sus obligaciones”, manifestó y subrayó: “El Presidente dice que apunta contra las cajas de las política, pero el ajuste a las provincias perjudica directamente a todos y todas las argentinas”.
Por último, Kicillof indicó: “Todas nuestras medidas de gobierno estarán orientadas a amortiguar y defender todo lo que se está abandonando o atacando desde el Gobierno central: nuestras posibilidades para hacerlo son limitadas, pero nuestra voluntad de proteger al pueblo bonaerense de este ataque no reconoce límites”. “Nos pueden atacar e injuriar, pero nosotros vamos a seguir recorriendo todos los pueblos y a seguir trabajando incansablemente para sostener y ampliar los derechos y por la justicia social. Lo que no pueden robarle a la provincia de Buenos Aires es su derecho al futuro”, concluyó.
Estuvieron presentes la vicegobernadora Verónica Magario; el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Alejandro Dichiara; integrantes del gabinete provincial; intendentes e intendentas; legisladores; representantes gremiales y de organizaciones sociales.