Viernes 3.5.2024
2.8.2019. Institucionalmente, las fuentes dicen que las diferencias no son abiertamente públicas ni circulan expedientes o notas en tal sentido, pero lo cierto es que en el Registro de las Personas de la provincia de Buenos Aires cada vez son menos inocultables las diferencias que mantienen los empleados que están afiliados a uno de los gremios más fuertes de la administración, la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), con sus propias conducciones.
El enfrentamiento afiliados-conducción se acrecentó este año, especialmente desde los primeros meses: fue cuando comenzaron las protestas por la equiparación salarial de los trabajadores del ministerio de Gobierno, del cual dependen el Registro, Seguridad Vial y los juzgados de Tránsito, entre otras tantas áreas.
En concreto, los empleados de Gobierno piden por el 125 por ciento de aumento en los básicos de todas las categorías, medida que la administración de María Eugenia Vidal adoptó para el resto de los ministerios. Sin embargo, el conducido por Joaquín de la Torre quedó marginado de tal decisión.
Los reclamos de los trabajadores comenzaron a hacerse sentir en febrero de este año y hasta el momento no fueron recibidos por De la Torre ni por autoridades responsables de destrabar el conflicto.
Semana a semana, hubo marchar a Gobernación y asambleas en los lugares de trabajo. Últimamente, las retenciones de tareas y paros sin asistencia a los ámbitos laborales fueron una constante.
Fue en esos ámbitos de reclamos en donde los trabajadores afiliados a UPCN dieron cuenta de la acefalía de representación al momento de evidenciar sus demandas por mejoras salariales.
Hace unos meses, dos mujeres pretendieron acercarle una nota al secretario general de UPCN, Carlos Quintana, mientras este encabezaba una reunión con afiliados. En ese texto, le pedían un mayor protagonismo del gremio en los reclamos: a los empujones, fueron repelidas por la seguridad del mandamás sindical.
Las diferencias se hicieron todavía más fuertes en los últimos días. Y el lugar fue la sede del Registro de las Personas ubicada en Avenida 1 y 59 de La Plata. Allí, visiblemente molesto, el delegado de UPCN, Daniel Bianchi, arrancó los carteles que reclamaban por el pago del 125 por ciento luego de que varias empleadas le reprocharon que su propio gremio, al que pertenencen y están afiliadas, "no está haciendo nada en esta lucha".
Durante el cruce de reproches (que también se hicieron extensivos al estrecho colaborador de Quintana, Diego Rétola), Bianchi no toleró los cuestionamientos y lanzó varios golpes contra uno de los trabajadores presentes. Un video que circuló por las redes y que este portal publicó en su momento en su cuenta de Facebook con fecha 23 de julio da cuenta de ese incidente.
Lo cierto es que a esta altura las diferencias gremiales son insalvables. Desde el punto de vista de la observación, parece ser que los afiliados van por un camino y los líderes de UPCN por uno diferente
